Ayer se sintió diferente. 𝘞𝘩𝘦𝘯 𝘵𝘩𝘦 𝘍𝘶𝘴𝘢𝘬𝘢 𝘶𝘱𝘨𝘳𝘢𝘥𝘦 𝘸𝘦𝘯𝘵 𝘭𝘪𝘷𝘦, 𝘐 𝘪𝘯𝘴𝘵𝘢𝘯𝘵𝘭𝘺 𝘬𝘯𝘦𝘸 𝘵𝘩𝘪𝘴 𝘸𝘢𝘴𝘯’𝘵 𝘢𝘯𝘰𝘵𝘩𝘦𝘳 𝘳𝘰𝘶𝘵𝘪𝘯𝘦 𝘌𝘵𝘩𝘦𝘳𝘦𝘶𝘮 𝘶𝘱𝘥𝘢𝘵𝘦, 𝘪𝘵 𝘧𝘦𝘭𝘵 𝘭𝘪𝘬𝘦 𝘸𝘢𝘵𝘤𝘩𝘪𝘯𝘨 𝘵𝘩𝘦 𝘯𝘦𝘵𝘸𝘰𝘳𝘬 𝘴𝘵𝘦𝘱 𝘪𝘯𝘵𝘰 𝘢 𝘯𝘦𝘸 𝘱𝘩𝘢𝘴𝘦 𝘦𝘯𝘵𝘪𝘳𝘦𝘭𝘺. Ethereum ha llevado una enorme carga de datos de los rollups durante años, y esta actualización finalmente aborda eso de frente. En el momento en que vi PeerDAS en acción, me di cuenta: > Los nodos ya no necesitan almacenar blobs completos, pueden verificar datos muestreando pequeñas piezas. > La misma seguridad, mucho menos sobrecarga. > Ethereum se vuelve instantáneamente más ligero y escalable. Luego está la capacidad de blob aumentada, que nos afecta directamente como usuarios. Más blobs significan más rendimiento de rollup, lo que significa tarifas L2 más baratas y interacciones de dApp más fluidas. > Los desarrolladores obtienen espacio para respirar. > Los operadores de nodos obtienen cargas de trabajo más ligeras. > ETH se vuelve aún más fuerte como un activo de liquidación. ¿Y la parte más loca? 𝘍𝘶𝘴𝘢𝘬𝘢 𝘪𝘴 𝘫𝘶𝘴𝘵 𝘭𝘢𝘺𝘪𝘯𝘨 𝘵𝘩𝘦 𝘨𝘳𝘰𝘶𝘯𝘥𝘸𝘰𝘳𝘬 𝘧𝘰𝘳 𝘵𝘩𝘦 𝘮𝘢𝘴𝘴𝘪𝘷𝘦 𝘶𝘱𝘨𝘳𝘢𝘥𝘦𝘴 𝘤𝘰𝘮𝘪𝘯𝘨 𝘪𝘯 2026 𝘢𝘯𝘥 𝘣𝘦𝘺𝘰𝘯𝘥. Conclusión: Cuando miro a Ethereum después de Fusaka, no solo veo una actualización, veo una red que avanza con confianza hacia su próxima era. Menores tarifas, mayor rendimiento, economías más fuertes. Desde aquí, la dirección se siente clara: Ethereum solo sube.