Beber café puede proteger contra la fibrilación auricular, no desencadenarla. Los pacientes que consumieron al menos 1 taza por día tuvieron un 39% menos de probabilidades de fibrilación auricular recurrente en los 6 meses posteriores a someterse a un procedimiento para restaurar su ritmo cardíaco normal en comparación con aquellos que se abstuvieron de tomar café. Los bebedores de café también tuvieron menos hospitalizaciones relacionadas con el corazón, y solo el 47% de ellos experimentaron otro episodio de fibrilación auricular en comparación con el 64% de los abstemios de café. Estos hallazgos desafían el consejo estándar para que los pacientes con fibrilación auricular eliminen la cafeína. Y complementan la investigación observacional que muestra un menor riesgo de fibrilación auricular entre los bebedores regulares de café (con cafeína).