Esta tarde, Maia Sandu, la presidenta pro-UE de Moldavia, pronunció un discurso sin precedentes a la nación tras las grandes detenciones de agentes pro-rusos en todo el país: "Con toda solemnidad, debo informarles que la soberanía, independencia, integridad territorial y futuro de nuestro país están en grave y inmediato peligro. El Kremlin ha gastado cientos de millones en un intento de desestabilizar y propagar la violencia y el miedo en Moldavia. Me dirijo a todos los ciudadanos leales: no permitan la rendición de nuestro país. [...] Rusia no actúa sola, tiene muchos cómplices aquí en Moldavia, traidores a su patria que la venderán por un beneficio, como lo han hecho antes. Estos hombres no tienen país, no creen en Europa ni en Rusia, no creen en nada más que en el dinero. [...]" El Kremlin cree que todos estamos a la venta, que somos demasiado pequeños y pocos para resistir, que ni siquiera somos un país. Pero Moldavia es un país y es nuestro hogar y lo defenderemos. [...]