FLASHBACK: Los demócratas contrataron al ex presidente de ABC para crear una 'miniserie' diseñada para convencer al pueblo estadounidense de que el 6 de enero fue una insurrección. No lo fue. Fue una protesta que se convirtió en un disturbio que terminó rápidamente. Cuando terminaron, el comité destruyó toda la evidencia que socavaba su falsa afirmación.