Un hombre oró a Dios para que lo salvara de una inundación. Llegó un barco. Él dijo: “No, Dios me salvará.” Llegó un helicóptero. Él dijo: “No, Dios me salvará.” Se ahogó. En el cielo, le preguntó a Dios: “¿Por qué no me salvaste?” Dios dijo: “Te envié un barco. Te envié un helicóptero… ¿QUÉ MÁS QUERÍAS?”