Conocí a Rachel Reeves en persona hace varios años. Ella expresó dudas sobre los planes de Jeremy Corbyn de gastar mucho en un fondo nacional de inversión. Con las tasas de interés cerca de cero en ese entonces, realmente pensé que habría sido un movimiento sensato. Pedir dinero prestado barato y usarlo para reconstruir nuestra infraestructura nacional en ruinas. Ahora estamos pidiendo dinero prestado caro para pagar la deuda. Mientras llevamos a nuestros mayores contribuyentes fiscales al extranjero y castigamos a las empresas y a la clase media. Controles de capital, impuestos a la salida, impuestos sobre la riqueza, impuestos sobre la renta: todo es mucho peor de lo que jamás fue la Corbynomics. No terminará bien.