Un cambio rutinario en la base de datos en @Cloudflare dejó fuera de servicio el 20% de la web durante 3 horas. Las plataformas de intercambio de criptomonedas se congelaron. Twitter murió. No se reportaron fallos en la blockchain, pero algunas interfaces se apagaron. Protocolos descentralizados, tuberías centralizadas. La ironía no fue sutil. Historia abajo.