Tienes unos pocos años de tu vida cuando tus hijos son pequeños, cuando estás a su disposición y tu tiempo no es tuyo, y simplemente tienes que aguantar y 'hacer lo que hay que hacer' si quieres que la humanidad continúe. Es asombroso lo que las personas pudieron soportar con tal paciencia hace 50, 75, 100 años y cómo actúan ahora como si fueran víctimas y estuvieran oprimidas.