América es una nación de creencias. Podemos proteger esa creencia deteniendo la inmigración masiva. De hecho, es nuestro mejor argumento para detener la inmigración masiva. El americanismo no es una raza, y no se transmite en nuestro ADN. Debe ser enseñado, vivido y transmitido a nuestros hijos. Esto se consideraba una verdad obvia desde nuestra fundación y "E Pluribus Unum", y ahora una facción disidente de paganos raciales posmodernos está tratando de deconstruir esa verdad obvia. No los dejes.