Elige una cosa. Conviértete en la persona que domina esa única cosa mejor que el 99% de las personas. Estúdiala obsesivamente y de manera consistente. Revisa todos los días. Rastrea tus decisiones y comportamientos. Así es como se construye el reconocimiento de patrones. Eso es lo que separa a los maestros de los promedio. Se necesitan años de repetición enfocada, pero así es como se gana la maestría.