La cultura de la HR Lady es el pico de Hajnali, por cierto la elección femenina como el árbitro definitivo de tu valor ¿Quién, si no una mujer difícil de conseguir, tiene el derecho de determinar si mereces existir? Si no fuera por la HR, ¿cómo podrían los Hajnalis competir en encanto? Se verían reducidos a la vida miserable de un bugman de meritocracia