La peligrosa duplicidad de Mahmoud Abbas. En su discurso ante la Asamblea General de la ONU, usó un pin de "llave", un símbolo inequívoco de su objetivo de borrar a Israel. Mientras que Hamas llamó a la masacre del 7 de octubre el "Diluvio de Al-Aqsa", Abbas quiere su propio diluvio bajo el disfraz de dos estados: millones de descendientes de árabes que abandonaron Israel en 1948 empujados a Israel para borrar el único Estado judío. La historia importa: en 1948 el mundo árabe declaró la guerra a Israel, después de lo cual muchos más judíos fueron expulsados de los países árabes a Israel que los árabes que abandonaron Israel. Hace mucho tiempo que los estados árabes deberían otorgar la ciudadanía a los descendientes de los que se fueron en 1948. La "clave" de Abbas es el viejo plan de la OLP: dos estados para un pueblo palestino y la destrucción del Estado judío. Esto no sucederá.