Un propietario de un lavado de autos de Van Nuys, de 79 años, presentó una demanda de derechos civiles de $50 millones alegando que agentes federales de inmigración usaron fuerza excesiva durante una redada que lo dejó con costillas rotas, traumatismo craneal y otras lesiones graves, a pesar de confirmar que es ciudadano estadounidense. Historia completa: