Los demócratas quieren una ayuda sanitaria para los millonarios que cueste 35.000 millones de dólares -sin protecciones contra el fraude- antes de estar dispuestos a abrir el gobierno. Mientras tanto, los estadounidenses perderán sus vuelos para el Día de Acción de Gracias, las madres pobres perderán la asistencia alimentaria y nuestras tropas no cobrarán.