> "¿Qué hago cuando mi hijo dice que algo es demasiado difícil?" Esta es una de las preguntas más comunes que recibimos. El primer paso es averiguar si el problema es la habilidad o la motivación. Si la tarea es realmente demasiado difícil, quizá deban volver atrás y construir una base más sólida. O si no están preparados para su desarrollo, quizá necesiten intentarlo de nuevo en unos meses. Pero si es una tarea que el niño puede hacer y simplemente sufre por falta de motivación, entonces encuentro que simplemente validar sus sentimientos suele ser suficiente para desbloquearlo. Puedes decirles: "Sí, esto SÍ es algo difícil. ¡La mayoría de los niños no aprenden a leer hasta los 6 o 7 años! De hecho, incluso hay adultos que no saben leer. Así que esto SÍ es algo difícil. Pero puedes hacerlo." Me gusta recordarle a mi hijo que hubo un tiempo en que ir al baño era difícil para ellos, pero practicaron y ahora es fácil. Normalmente provoca risas, pero también es un buen recordatorio: pueden hacer cosas difíciles.