Bitcoin DeFi tiene un problema: Bitcoin no puede ejecutar una lógica financiera compleja. Pero mover BTC a otras cadenas implica puentes, envoltorios y riesgo de custodia. Arch soluciona esto ejecutando la ejecución fuera de la cadena mientras mantiene la liquidación en Bitcoin. Sin puentes. No hay BTC envuelto. Solo Bitcoin nativo. Aquí es donde un entorno de ejecución se vuelve esencial. El ArchVM está diseñado para procesar lógica financiera fuera de la cadena en un entorno controlado que puede hacer cumplir reglas, actualizar posiciones y determinar resultados antes de que se finalice cualquier cosa sobre Bitcoin. Los programas dentro de ArchVM pueden definir cómo se deposita la garantía, cómo se calculan los límites de crédito, cómo se actualizan las obligaciones y cómo deben activarse los pagos estructurados. Para que esto funcione de forma segura, el entorno de ejecución debe mantenerse alineado con Bitcoin en todo momento. Arch logra esto mediante el indexador Titan mempool y un grafo acíclico dirigido de transiciones de estado que rastrean cómo evolucionan las transacciones de Bitcoin en tiempo real. Si una transacción relevante para un programa es reemplazada o reorganizada, Arch utiliza métodos de rollback o reaplicación para mantener el estado de la aplicación consistente con la capa base. Una vez que se ha procesado la lógica y el resultado es claro, el acuerdo pasa a Bitcoin. Los validadores que participaron en la evaluación del programa también poseen acciones clave dentro de un esquema de firma umbral FROST plus ROAST sobre una dirección de Bitcoin. Esto les permite producir una transacción estándar de Bitcoin que refleje el resultado del programa sin envolver activos ni depender de una capa de consenso separada. La combinación de ejecución fuera de cadena y liquidación en cadena mantiene a Bitcoin en el centro de los flujos de trabajo financieros. Permite coordinar préstamos, formación de crédito y pagos estructurados mediante lógica programática, asegurando que el liquidamiento final utilice BTC real en la capa base. Este modelo evita activos sintéticos, evita puentes y evita transferir la confianza a sistemas externos. Arch proporciona a los desarrolladores el entorno necesario para crear aplicaciones financieras que operan a velocidad de ejecución mientras se deciden directamente sobre Bitcoin.