Jill y yo apoyamos a la comunidad judía en Australia mientras enfrentan pérdidas y sufrimientos inimaginables tras un ataque dirigido en una celebración de Janucá. Es impactante e inconcebible. Debemos unirnos contra la violencia y el antisemitismo, y no dar al odio ningún refugio seguro en ninguna parte del mundo. Para los judíos que encienden una menorá esta noche: sé que es difícil encontrar esperanza mientras se lleva el dolor. Pero tu resiliencia y capacidad para encontrar fe y alegría a pesar de siglos de persecución y dolor siempre han sido tu luz. Nunca debemos perder la esperanza.