La analogía con la decisión del Noveno Circuito contra Apple es que la empresa ahora tendrá que tratar su App Store como una autopista de peaje para los desarrolladores, mientras que antes la empresa les imponía un impuesto. Hay una gran diferencia entre peajes e impuestos. Un peaje está vinculado al coste subyacente de prestar un servicio. Un impuesto puede imponerse de forma más arbitraria, y la decisión del Noveno Circuito parece sugerir que la tasa del 30% de la App Store era una forma de cobro de alquiler.