Con la reciente caída de BTC por debajo de 110,000, y tras reflexionar sobre mi estado de ánimo más relajado, quiero compartir algunas de mis impresiones sobre el mercado actual. Primero, no espero un gran rebote a corto plazo. La caída extrema del 11 de octubre y las grandes liquidaciones, además de beneficiar a unas pocas instituciones y personas, han causado un daño enorme al mercado en su conjunto. Desde instituciones hasta individuos, todos han sido arrasados. Además de las pérdidas financieras significativas, el daño psicológico es aún más devastador. Para las altcoins y los CEX, la última capa de vergüenza ha sido despojada. Desde principios de este año, una pregunta ha estado rondando en mi mente: "¿El riesgo y el rendimiento en el mundo de las criptomonedas realmente siguen siendo correlacionados?". La confianza es oro, la liquidez también es oro, y a corto plazo, parece que ambos han desaparecido. En esta situación, mantener la actual fluctuación de precios sería un buen resultado; lo más probable es que el mercado frágil se rompa debido a algún evento de riesgo. La historia de DAT ha llegado a su fin. La nueva narrativa que comenzó en junio también está llegando a su conclusión. Tom Lee, como figura central del concepto DAT, ha declarado recientemente que la burbuja de DAT "ha estallado". Él cree que el modelo de tener grandes activos criptográficos (como ETH/BTC) como activos de tesorería de la empresa está siendo seriamente cuestionado. Algunas de estas empresas ahora tienen una capitalización de mercado incluso inferior al valor de sus activos criptográficos. Él lo llama una señal clara: este juego de "tratar los activos criptográficos como activos de tesorería" está comenzando a desmoronarse. Aunque todavía tiene esperanzas de que su bag de $ETH alcance nuevos máximos, los que entienden, entienden. También hay muchos factores macroeconómicos que interfieren: el cierre del gobierno de EE. UU., las tensiones en las relaciones entre EE. UU. y China, muchas partes del mundo siguen atrapadas en la guerra, y hay preocupaciones sobre la corrección en los máximos del mercado de valores estadounidense. Y la única certeza positiva es la posibilidad de recortes en las tasas de interés. El mercado es frágil, y el mundo se dirige hacia la agitación y la división.