Estamos luchando por una estrategia nacional de IA que le dé a Little Tech una oportunidad justa y mantenga a Estados Unidos a la cabeza. El proyecto de ley de IA de CA (SB 53) incluye algunas disposiciones reflexivas que tienen en cuenta las distintas necesidades de las nuevas empresas. Pero pierde una marca importante al regular cómo se desarrolla la tecnología, una medida que corre el riesgo de exprimir a las nuevas empresas, ralentizar la innovación y afianzar a los jugadores más importantes. El mayor peligro de la SB 53 es que sienta un precedente para que los estados, en lugar del gobierno federal, tomen la iniciativa en el gobierno del mercado nacional de IA, creando un mosaico de 50 regímenes de cumplimiento que las nuevas empresas no tienen los recursos para navegar. Los estados tienen un papel importante en la regulación de la IA. Pero si los legisladores realmente quieren proteger a sus ciudadanos, este no es el camino. Deben apuntar a los usos nocivos a través de leyes de protección al consumidor y salvaguardas similares, no dictar cómo los tecnólogos construyen la tecnología. La regulación inteligente de la IA puede ayudarnos a ganar la carrera de la IA, pero necesitamos que el gobierno federal lidere el gobierno del mercado nacional de IA. Las conversaciones recientes con la Cámara y el Senado sobre un estándar federal de IA son un paso adelante alentador. Más por venir.