Me hago preguntas similares ahora mismo. Creo que deberíamos esforzarnos más en identificar y difundir información sobre personas que causan daño innecesario, pero (en parte como resultado de la "cultura de la cancelación") ahora es difícil identificar a las personas incluso cuando son obviamente y demostrablemente innecesariamente dañinas porque parece más intenso de lo que realmente es (o debería ser). La gente asume que criticar a alguien públicamente significa que intentas poner a todos en su contra, cuando en realidad significa que tienes información sobre esa persona que puede ayudar a otros a navegar su comportamiento y protegerse. Quiero vivir en un mundo donde la crítica esté debidamente matizada y donde no me represalias por compartir información factual y permitir que otros la interpreten y matizen. Pero, lamentablemente, no vivimos en ese mundo, así que las personas antisociales y dañinas simplemente continúan mientras se beneficien de condiciones sociales donde su daño es oculto o privado.