Pienso mucho en el conocimiento común, en cómo uno de los propósitos de los medios es legitimar el conocimiento común, y en cómo un conflicto constante sobre las redes sociales es que crean una vía alternativa para que el conocimiento se haga común.
Actualmente circula un ensayo sobre discriminación racial y de género. Esto era conocido por todos en las instituciones correspondientes. (También era extremadamente común en la industria tecnológica, en menor medida que una prohibición del 90%+ para el empleo de personas desfavorecidas.)
El hecho de la discriminación racial explícita en las instituciones estadounidenses no solo no es noticia, sino que es lo contrario de lo que es una noticia. No lo encontrarás mencionado en el New York Times un jueves típico porque el New York Times no necesita decirte que el agua está mojada.
Hay muchas personas que, a través de diversos procesos sociales, concluirán por la ausencia de ese artículo en el NYT que el agua, en realidad, no está húmeda. Concluirán que la discriminación en las instituciones estadounidenses es *a veces rumoreada*, como que se finge un alunizaje.
Una de las cosas que logra el ensayo, tanto al existir en la forma en que existe como al hacerse viral, es que da al New York Times y a instituciones similares cierto permiso para observar y comentar cosas que ellos mismos no perciben como teniendo otros martes.
Y de hecho encuentras a un columnista del Times recomendándolo a sus lectores, con algún proceso editorial que se cuida de describir la característica de que el agua está mojada como supuesta, descrita como ocurrida, aparentemente algo en algunos lugares, etc.
Nadie ha escrito realmente este ensayo sobre la industria tecnológica todavía. Nadie ha citado, en una sola página, los informes de empresas cotizadas, descrito qué es un KPI ni citado directamente correos electrónicos de responsables de contratación que impiden contratar a hombres blancos y asiáticos.
Y así, muchas personas profesan, por ignorancia, optimismo o razonamiento social complicado que implicaba no poca minimización personal del riesgo, que probablemente eso no ocurrió, o no ocurrió rutinariamente, o no ocurrió rutinariamente como política oficial.
Y absolutamente ocurría de forma rutinaria como política oficial, en toda la industria tecnológica, y "todo el mundo" lo sabe.
Para su crédito, el WSJ en 2018 informó de una demanda contra YouTube, que alegaba que YouTube había discriminado a hombres blancos y asiáticos. Hizo un trabajo importante como corroborar esta afirmación, encontrando a alguien en Google dispuesto a decir "Oh sí, obviamente. CORREOS EXTENSOS."
@_mgriisser creo que esas patologías son malas y nos cuestan mucho dinero. Pero hemos decidido, como sociedad, que están en un plano distinto a la discriminación racial explícita.
@platosbeard69 *causal
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